jueves, 20 de diciembre de 2018

LA HORA DE CRISTAL




Es un momento frágil, en que se silencia el ruido del mundo.

Un conticinio.

El momento más callado.

Puede suceder a cualquier hora del día.

En las mañanas límpidas, o en las noches mudas.

Yo lo llamo la hora de cristal.

El instante en que se disuelve el velo que nos separa de lugares desconocidos.

Y el Infinito se mete por la ventana.

Y me visita.

El aura de cuanto me rodea, cambia.

Y titila con un halo breve y radiante.

Los muebles, los objetos, no tienen peso, ni materia.

Ni ayer, ni ahora.

En la hora de cristal se escabullen las presencias por una puerta secreta.

Y sin palabras, me hablan.

Sin brazos, me acunan.

Sin argumentos, me consuelan.

Lo imposible sucede en la hora de cristal.

Vuelan las plumas, aparecen objetos perdidos, pétalos de flores viejas.

Mensajes antiguos saltan de libros que no he leído en años y abro al azar, sin razón alguna.

Cartas etéreas, escritas de puño y letra.

Regalos inesperados.

Atesoro y estoy atenta cada día, a mi hora cristalina.

Cuando el carnaval del mundo calla.

En mi hora de cristal, escucho palabras de amor.

Las más bellas que me hayan dicho jamás.

“Si estando allá te amaba; desde aquí, mucho más…”

PD: Son días en que me embarga la melancolía, un sentimiento que he aprendido a disfrutar. En mis horas de cristal, todo cobra sentido y mi vida recupera su magia. Desde este, mi lugar prístino y cristalino, les deseo a todos, que celebren el nacimiento del Niño Jesús, esa áurea presencia que vino al mundo a hablarnos de bondad y humildad, con sus seres queridos, los de aquí y los de más allá.
¡FELIZ NAVIDAD!


4 comentarios:

  1. Bonita idea con esa "hora de cristal" que nos dejas.
    Un abrazo para llevar un poco de alegría en estos días tan especiales.

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  2. Gracias Rafael, si te inspira un poema de los tuyos la hora de cristal, adelante, seria un honor.
    Un abrazo grande!

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  3. Feliz Navidad!! Deja que la melancolía te acompañe, no la rechaces, mientras recordamos aun queda algo de su luz, no queramos esconder la tristeza, la necesitamos para ponernos una sonrisa y asistir a todos los eventos familiares. Un abrazo grande

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    Respuestas
    1. Ay Ester, la verdad eres lo máximo. Gracias por estar ahi y por tus siempre sabias palabras!
      Un abrazote enorme!

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