domingo, 18 de septiembre de 2022

EL TRAJE


Sucedió hace unas pocas semanas.


El objeto en cuestión: un traje antiguo.


Éste, llegó a Canadá en la maleta de nostalgias de mi hijo.


Recuerdo que mi padre lo lucía y lo bailaba con su “extraña elegancia” y su “cuerpo de percha”, todas las Navidades caraqueñas.


Aquí, vivió en la oscuridad polvorienta del closet de mi hijo por muchos años, yo ni lo sospechaba.


Hasta que un día, le llegó su momento.


Eternidad, poesía y amor, se alinearon en una tarde veraniega.


Ella, la novia, “¡Radiante cual ninguna!, con su vestido blanco de querube, semejaba un destello de luna, dormido en el regazo de una nube”, como mi padre solía recitar.


Él, mi hijo, su príncipe, vistiendo el traje de su abuelo, remozado de infancias y de sueños.


Mi hijo, en su gesto de rescatar aquel traje, en una especie de pesca de arrastre universal, se trajo consigo en un instante, toda la cosmología del abuelo.


Traje de luces.


Una constelación de buenos augurios y dones, lo vistieron.


Se hizo un pequeño milagro en este gesto amoroso.


¡Milagro de presencia!


20 de marzo 2000, el ultimo brindis de un poeta.
 Foto por Meen Fontijn


miércoles, 7 de septiembre de 2022

LA LLAMA AZUL

 



Hace ya tiempo que me tocó “la llama azul y trémula: la del amor” (Octavio Paz), aunque haya querido el destino que la mitad de mi alma volara a otros dominios hace algunos años…


Esa holgura del alma, lo vuelve a uno invisible.


Pero ¿y a qué viene este tema del amor y enamorarse?, me pregunto.


Será que, después de la reciente boda de mi hijo y su bella esposa, el amor se alborota y se asoman los poemas, como las golondrinas de aquel balcón becqueriano y los versos regresan.


“Estar enamorado amigos, es encontrar el nombre justo de la vida…


Es advertir en unos ojos, una mirada verdadera que nos mira…


Es sorprender en unas manos, ese calor de la perfecta compañía…


Es sospechar que, para siempre, la soledad de nuestra sombra esta vencida…


Estar enamorado amigos, es adueñarse de las noches y los días…"


(extracto de Estar Enamorado de Francisco Luis Bermúdez)


Reconfortantes palabras que me acompañaron ayer y hoy dan sosiego.


Sigo aprendiendo que uno ese enamora todo el tiempo, en cada alegría, en cada ternura, en cada motivo para celebrar. 

La llama azul y trémula, esa lámpara de aceite inagotable, la del amor.



“Quédate con aquellos que te notaron

cuando eras invisible.”

Charles Bukowski

sábado, 3 de septiembre de 2022

GOOD MORNINGS

 


A mi buena amiga chilena y compañera de caminatas, desde hace años, le gusta contar autos (para mí carros).


Nos conocimos en 2006 en una empresa de ingeniería, aquí en Calgary, así que no es raro que ella sea una persona muy observadora y cuantitativa. Yo lo contrario.


Ella divisa y cuenta los ciervos (para mí venados) a gran distancia, cuando yo no veo nada. También tiene observaciones como:

-      ¿Te fijaste que ese señor llevaba un anillo en el dedo gordo del pie?

-      No, me fijé en que tiene la mirada melancólica.

Dos maneras diferentes de observar al mundo, cada una en su estilo.

El hecho es que mi amiga lleva las estadísticas de cuantos carros hay estacionados en el parking de Fish Creek, el parque donde caminamos. A veces ninguno, otras veces muchos, dependiendo de la hora, el día de la semana y el estado del tiempo.


Pero sucedió que un día se me ocurrió decirle que, en vez de contar autos, contáramos: Good Mornings.


Es decir, la cantidad de personas que nos dan los buenos días o afines mientras caminamos.


Establecimos algunas reglas, como: vale si uno los da primero y nos responden, también valen los Hi o Hello, y las sonrisas y las inclinaciones de cabeza, sobre todo de los ciclistas que no pueden soltar el volante.


Y así fuimos contando, llegamos como a 15 cuando ya perdí la cuenta.


Autos había 8, creo.


Un buen ejercicio, del cual concluí que, mientras en el mundo haya más Buenos Días y sonrisas que carros, sobran razones para ser optimistas.


¡Buenos Días, Tardes o Noches para todos!


 Y los acompaño con una sonrisa.