jueves, 21 de enero de 2021

EL ESTANQUE

 


 

Hoy me propuse practicar ese don infantil, de conferir condición sagrada a lo ordinario.  

Ayer aprendí que el Estanque (1) es un diamante. (fascinante historia, La Leyenda de la Peregrina, Carmen Posadas)

Esta analogía de transparencias me animó a revisar mi joyero.

Cuando empecé a reconocer mis prendas una por una y ponerles nombre, desenterré un gran tesoro, naufragio pirata quizás.

Mañanas incandescentes que se forjan a fuego, y poco a poco, fraguan un brazalete de oro puro que rodea al horizonte. A esta pulsera de luz la llamaré simplemente así, Horizonte.

Otros días comienzan con un espejo celeste de brillos aceitosos. Amanecer de nácar. Madreperla.

La tarde, corona con que termina el día, lleva a veces incrustaciones de coral y topacios místicos. 

Otras son simplemente una cortina de Azabache.

El río, ese hilo infinito que nunca se detiene, un collar sinuoso, que se viste de esplendores, dependiendo de la estación.

Ahora, en el invierno, ónix.

En la primavera, zafiros.

En el verano, turquesas y aguamarinas.

En el otoño, jade y ámbar.

Joyas que transitan mansamente, suspendidas por delgadísimos e intrincados hilos de cobre, plata y oro. Luz.

El río. Torrente Amable.

Así también defino mi abundancia.

Y en fin, volviendo a ese don de conferir condición sagrada a lo ordinario, en la cual, para un niño un palo es una espada flamígera; una piedra, un talismán mágico; una moneda, un tesoro pirata, pues hoy, después de escuchar la fascinante historia de la Perla Peregrina y el Estanque, quise compartir estas otras joyas que me rodean.

Al final, esa niña interior me persigue y siempre me alcanza.

Con razón dicen que, como leí hace poco:

“La vejez es una máscara. Si te la quitas, descubres el rostro infantil del alma.”

Jose Bergamin.


(1)  El Estanque. Se trataba de un diamante de absoluta transparencia y contaba con un peso de 100 quilates.Fue el rey Felipe II de España quién adquirió el diamante en bruto en Amberes, y pagó por él 80.000 escudos. En España lo hizo tallar, no se tiene certeza si en Madrid o en Sevilla. El resultado fue una piedra preciosa en forma de cuadrado o tabla, maravillosamente trabajada, y a causa de su transparencia absoluta, su tono azul acerado y su forma se le denominó “El Estanque”.


viernes, 15 de enero de 2021

MIGAJAS VIAJERAS

 


Este post es un paréntesis en mis “meditaciones impulsivas”, y un agradecimiento.


Quienes, a lo largo de los años, me han acompañado en esta Calle del Eco (este es mi post numero 340), saben que aquí he dejado “dichas y quebrantos, los dos componentes que forman mi canto”, como dice la canción Gracias a la Vida.


Hoy quisiera, con humildad, presentarle a mis escasos, pero fieles seguidores, el libro que escribí sobre mi proceso de duelo, mis reflexiones ante la pérdida que ustedes conocen bien.


Lo escribí en inglés, pues vivo en este maravilloso país, Canadá, desde hace ya casi 15 años. 


Se llama HOPECRUMBS, Finding my Way through Grief, que en Español se traduciría algo así como, Migajas de Esperanza, Encontrando mi camino a través del duelo.


Salió a la luz el día 23 de noviembre de 2020 justo 4 años después de la inesperada partida de mi gran amor.


Hoy en día, esas migajitas han llegado a muchas partes, a Inglaterra, España, Noruega, Alemania, Estados Unidos, México, Venezuela y Canadá, claro. Y he recibido de alguna manera la compañía invisible y amorosa de quienes me han leído y aceptado mis palabras con tanta generosidad. Para ellos, gracias otra vez.


Algo que también me complace mucho, es que he podido devolver algo a quienes tanto me ayudaron en su momento, pues de cada libro vendido, una donación va al Bob Glasgow Grief Support Centre de Calgary, donde trabaja un ejército de profesionales del alma.


En fin, sin más palabras, aquí les dejo Hopecrumbs y el link donde se puede adquirir.


hopecrumbs.com





Mil gracias!

miércoles, 6 de enero de 2021

UN LARGO DESAYUNO



 

La vida es un largo desayuno.


Y es que, en mi tierra, cuando uno aprende algo nuevo, uno dice:


Me desayuno.


Mi esposo británico aprendió esto y cuando descubría alguna novedad en su vida me decía: I am having breakfast!


Hace poco, mi hijo se desayunó con la palabra ósculo, es decir, beso.


Semanas atrás se desayunaron con la palabra “pletórico” y ahora la usan con mucha frecuencia.


Yo misma, cada día, aparte de mi cotidiano “sanduchito” con café, me desayuno con deliciosos descubrimientos.


A veces me estoy desayunando todo el día.


No en balde dicen que el desayuno es la comida más importante del día, al menos en mi época, pues había que desayunar como un rey, almorzar como un príncipe y cenar como un mendigo. Aún lo practico.


Que puede ser más rico que un desayuno criollo, con arepa, caraotas negras, queso de telita y huevos revueltos; quizás aprender que, si uno pudiese viajar a la velocidad de la luz, uno llegaría a Plutón en cuatro horas.


Me desayuno.


 O un English Breakfast, con huevos fritos, tocineta, tomates, chorizos, black pudding (morcilla), pues igual de nutritivo es quizás sorprenderse con que la lengua de una ballena pesa tanto como un elefante.


Me desayuno.


O unos croissants franceses con almendras, mantequilla, mermelada de fresa, tal vez aprender que la etimología de la palabra compasión viene del vocablo griego συν + πάσχω = συμπάσχω, “sufrir juntos”.


Me desayuno.


Panquecas con jarabe de Maple, French Toast, huevos benedictinos…


El músculo más fuerte del cuerpo es la lengua.


Nada es tan inútil como parece.


Los perros comprenden más de 200 palabras.


Me desayuno.


Me desayuno.


Me desayuno.


En fin, mientras haya cosas que aprender y con qué sorprenderse cada día, pues sí, definitivamente, la vida seguirá siendo un largo desayuno.

 

Chiste para comenzar el año con humor:

El esposo infiel llega tarde a la casa y la esposa le recrimina:

¡Lo sé todo!

Y el esposo le responde:

Ah sí, ¿Cuál es la capital de Groenlandia?

(Para que algunos se desayunen, la capital de Groenlandia es Nuuk)