Dependiendo del color, los
vientos, la latitud, la agitación o algarabía.
Los apacibles, casi siempre esconden su furia por debajo de
un espejo inescrutable.
Los lentos y transparentes dan vida a su alrededor;
Otros son tan generosos
que convierten todo lo que tocan a su paso, en lugar encantado.
A veces se enfurecen y arrasan con todo.
Son cambiantes y camaleónicos
Confunden.
Pero son casi siempre anchos, mansos y sentimentales
Son los ánimos del rio.
Y es que, de temperamento Caribeño, pasé a tener temperamento fluvial.
De sardina pasé a ser
trucha.
Y es que a falta de playa,
buenos son ríos.
El mío, es presencia mística
cotidiana.
Verde esmeralda, botella, turquesa, zafiro, gris o azul hielo.
Mi rio corre.
Sin prisa.
Creo que el temperamento fluvial es
viajero: un gran viaje.
En eso estamos todos.
Viajando parsimoniosos, agitados,
embravecidos o dóciles.
Disolviéndonos.
Como dice Machado:
“La vida baja como un ancho
río”
Mi rio |
A mi no me gusta mucho mi temperamento xD Pero bueno, esa es otra historia. Esperemos que el río nos lleve a buen puerto, nunca mejor dicho. Un puerto tranquilo lleno de aquello que tanto nos gusta. En el que poder darnos un chapuzón y pescar, donde el tiempo no pasa. Un abrazo muy grande!
ResponderBorrarHola Roland! A mi si me gusta tu temperamento!! Y no te asustes, la verdad, no se si pueda cumplir mi palabra de parar por un tiempo en 200! Es que tengo un proyecto de arte, que requiere mi atencion. Ya te contareee! Un abrazote!!!
BorrarQuizás por eso somos como somos cada uno de nosotros.
ResponderBorrarUn abrazo.
Asi es Rafael, como que todos somos rios!
BorrarUn abrazo grande!
A saber, creo que el mío es camaleónico, pero los cambios que sufro ya no son tan agudos como solían ser.
ResponderBorrarHay unos volátiles que se van por el cambio de vientos, y con justa razón pues los cambios bruscos afectan cualquier temperamento, jajaja.
Hoy no estoy con las aguas, Leo. Sorry.
Pero me he dejado pasear en tu ritmo fresco, de río.
Hola Bea
BorrarGracias por dejarte arrastrar al menos por esta corriente jaja, a veces uno esta en otros elementos, viento, fuego,tierra, cada quien con su propia naturaleza. Un abrazote Bea y feliz fin de semana!
Es el río que nos lleva Natalia.Nosotros solo somos nenúfares a la deriva, a veces dóciles, a veces cabreados, pero siempre viajeros de un río que "va a dar a la mar, que es el morir" en versos de Jorge Manrique.
ResponderBorrarUna bella forma de autoanalizar ese temperamento que duerme en nuestro interior y que a veces despierta y casi siempre de mal humor.
Abrazos
Manrique, Machado.,, que genios. Todo es poesia/
BorrarUn abrazo y gracias por tu maravilloso comentario!