miércoles, 14 de junio de 2017

CAPITULO 2 - DANA LA LLAMA - EL ASCENSOR





Dana la Llama regresó a su existencia estática, allí sobre la chimenea.

Por un momento pensé que todo había sido un delirio.

Una alucinación.

Como los pelícanos pintados con el naranja fluorescente del amanecer, que pasaron en fila india por mi ventana.

Continúe con mi caos diario, quise decir con mi vida diaria.

En este planeta sin atmósfera, donde pernocto actualmente.

Un lugar árido donde hasta las lágrimas secaron.

El llanto seco es el más triste de todos.

Lágrimas estranguladas, asfixiadas en la marea negra.

La ausencia es un alicate que aprieta el pecho.

Pero, en fin, salí a trabajar, como todos los días.

Como el infausto aquél, cuando, al atravesar la puerta giratoria del edificio, una equivocación del destino me lanzó tangencial y vertiginosamente a un Universo paralelo.

Y me dejo botada en este planeta despoblado en el que ahora habito, adonde llegué con todos los huesos de mi cuerpo, rotos.

Me olvidé de Dana la Llama, y pensé en el reporte que tenía que entregar.

Enfrascada en mis tediosos pensamientos, entré al ascensor.

Cuando ya me disponía a marcar el piso 14, me di cuenta que alguien más estaba en el ascensor: ella.

Dana la Llama.

Hola – me dijo jovial.

     Sacudí la cabeza.

Sin duda, esto era un verdadero delirio.

Me dispuse a apretar el botón del piso 14.

Pero Dana se me adelantó y con la nariz, marcó un botón que nunca había visto.

Parecía un 8 perezoso, un 8 durmiendo.

De mis épocas de cálculo diferencial, recordé el símbolo del Infinito.

La puerta del ascensor se cerró y sentí que flotábamos.

Yo me olvidé del reporte y de todo.

¡Qué más da!, si es una alucinación, pues adelante, y si es un camino para encontrar las lágrimas mojadas, el aire y sanar mis huesos, pues bienvenido.

De pronto, el ascensor, o cohete, no lo sé, se paró en seco en el piso del 8 perezoso…

La puerta se abrió.

Que proceda el infinito…

Esta historia continuara…


PD: Heme aquí, improvisando un poco porque ni yo misma se dónde va a conducir esta historia, este viaje a través del duelo con mi compañera Dana La Llama. Pero, en fin, son notas importantes que algún día podré ver con eso que llaman “Perspectiva”. El próximo sábado me voy a ese lugar donde se escuchan los murmullos del universo, el umbral.

Mientras tanto, siento su presencia plena y gentil: sublime. Me lo susurra al oído, cada día:  
“Here I am. Lovely one!”

6 comentarios:

  1. Y por aquí te seguimos, sea a donde vayas llevas compañeros :) Escribir es bueno y tus textos siempre son interesantes para, hace ver las cosas al menos, con perspectiva.
    Un abrazote grande!!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Y como es posible que uno quiera tanto a alguien que no conoce personalmente? Gracias Roland!
      Te conozco en la distancia y eres una gran persona.Gracias por estar ahi!
      Un abrazote enorme!

      Borrar
  2. Espero que ese lugar que dices, donde se escuchan los murmullos del universo, te llene de paz.
    Un abrazo.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Gracias Rafael, recibo tus comentarios con mucho agradecimiento.
      Un abrazo grande

      Borrar
  3. Tu sigue escribiendo, nosotros te seguimos leyendo y llegaremos juntos a donde quiera conducirnos tu historia. Abrazos

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Que buena compania tengo Ester, es una suerte! Y bueno, s no llego a ninguna parte, al menos me sirve de terapia. Espero no aburrirlos mucho, todavía tengo esa voz sombría, pero Dana espero la suavice.
      Gracias y abrazos!

      Borrar

Tu comentario es siempre apreciado. Gracias!