Después del viaje luminoso de Chispita, en el
bosque encantado reinaba la calma y el silencio.
El Señor de los Juguetes tuvo que hacer un
largo viaje, sin retorno, y su fiel asistente, el pájaro carpintero Toc Toc,
y todas las aves, mariposas y luciérnagas del bosque se durmieron y callaron
por un buen tiempo.
Hasta que un día, un dulce día, comenzó a
soplar una brisa.
Mas bien, una Brisita.
Suave, fresca e inquieta.
Tan inquieta, que de tanto dar vueltas por
entre las hojas y alrededor de los árboles altísimos, perdió la B y se convirtió
en Risita, un despeinado y diminuto torbellino.
Risita, daba vueltas y vueltas sin
cesar, provocando cosquillas en todo lo que tocaba.
Las luciérnagas titilaron, riendo; los
colibríes agitaron sus alas, sobresaltados; las arañitas despertaron con risa en
sus patas y comenzaron a tejer de nuevo.
Hasta Toc Toc, abrió los ojos,
extrañado por tan inesperada agitación.
El bosque encantado se llenó de risas y
colores, otra vez…
Pero después de tanto revolotear, Risita
se sintió cansada.
Hasta los remolinos despeinados tienen que
buscar un lugar donde dormir.
Y así, un lindo dragoncito alado, Polaris,
también contagiado por las risas, vino al rescate.
Risita se acurrucó en sus alas y se
dejó llevar.
Sobrevolaron el bosque encantado, la Cueva de
los Deseos, el Cine, el Archivo General, todos lugares donde Chispita fue tan
feliz, hasta que llegaron a lo que sería su hogar por los próximos meses.
Era un refugio muy acogedor, hecho de musgo y
lavanda; la camita, suave y mullida, tejida con dedicación por las arañitas del
bosque, con risa en sus patas.
Allí, Risita, se recostó, agradecida y
contenta de tener un lugar donde descansar.
Risita, el remolino despeinado, se dejó
arrullar por las aves del bosque.
Una en particular, Toc Toc, velaría su sueño.
La aventura continúa...
PD: Ya muchos lo saben, pero los demás podrán advertir
que voy a ser abuela por segunda vez y esta vez de una niña. Chispita va a tener una hermanita. Estamos que no
cabemos de contentos. Risita, la Brisita, que perdió la B, está inspirada en mi
hija, su mama, que literalmente era un remolino travieso y despeinado, y tiene risa en las manos.
Enhorabuena, el nacimiento de cada niño es la renovación de la fe de Dios en la humanidad. Seguiremos sus aventuras. Te mando un abrazo desde mis vacaciones,
ResponderBorrarGracias Ester, así es, es la renovación de la vida y de la esperanza. Disfruta tus vacaciones. Espero el calor no se tanto jaja
BorrarUn gran abrazote!
Pues enhorabuena y seguro que todo irá bien y será una luz que brille con fuerza a vuestro lado.
ResponderBorrarUn abrazo especial.
Gracias amigo Rafael! Una nueva ilusión!
BorrarOtro especial abrazo para ti!