ISRAEL Y JORDANIA – JULIO 2018
Todo lo que hago, escribo, pienso y respiro,
está dedicado a él.
Mi gran amor, M.J.F.
A mi lado siempre y también en este viaje…
MEMORIAS DE UN VIAJE INOLVIDABLE
He aquí mi humilde homenaje
A Pedro y José Manuel
(Reverendos Padres)
Por traernos a este viaje
por Jordania e Israel
También a los Peregrinos
De Calgary a Extremadura
Galicia, Caracas, Houston
Compañeros de camino
Compañeros de aventura
Llegamos a Tel Aviv
En un Julio caluroso
Y partimos desde allí
A un recorrido glorioso
Listos ya en el autobús
Yasser, nuestro guía estrella
Nos hablaba de Jesús (y de todo lo demás)
Con rapidez de centella
Mediterráneo sonriente
Cesaria, Haifa, el desierto
Estar en el Medio Oriente
Es como soñar despierto
A Nazareth el bus siguió,
Ciudad, no de gran tamaño
Donde todo comenzó
Hace más de dos mil años
En tierras de Galilea
Pernoctamos esa noche
El cuerpo
con leve “pea” (significa
borrachera en venezolano)
Y el corazón al galope
Temprano, al siguiente día
Parada en Monte Tabor
En donde el profeta Elías
Moisés y compañía
Se apareció de repente
A Jesús y a otra gente
Que estaban en reunión
Sucediéndose el milagro
De la
Transfiguración.
Admito que no sabía
Mucho de esa iniciación:
Jesús de luz se cubría
Iniciando su misión
A Caná nos llevó el Padre
Milagro por demás fino:
A petición de su madre
Jesús, del agua hizo vino
Y por si poquito fuera,
De regreso a Nazareth
Fuimos casa de la Virgen
No es un recinto cualquiera
No una casa del montón.
Lugar radiante y excelso
Sede de la Anunciación
En donde el Ángel Gabriel,
Se le apareció a María
Y le dio las buenas nuevas:
Mamá serás del Mesías
Apenas un día hermoso
Y ya las expectativas
En crescendo jubiloso
Sugieren lo que vendría
Mar de Galilea
Donde Jesús caminó
Sobres las aguas del lago
Y también allí pescó
A Pedro,
Juan y Santiago (de esto no
estoy segura pero rima)
Cafarnaúm
Antigua
Sinagoga
Casa de Simón Pedro
Monte de Las Bienaventuranzas
Lugares que había escuchado
En clases de catecismo
que en mi interior resonaron
Más poderosos que un sismo
Al terminar la jornada
Navegamos en la luz
de una tarde encantada
En la
barca de Jesús
¡Qué mejor meditación!
En esa
hora santa y noble
¡Qué mejor servicio a Dios!
Que bailar un pasodoble
Pero el momento certero:
Una oración hecha en calma.
“Buenos Días Señor, a ti el primero”
Breve oasis para el alma
Camino al destino diario
Con el autobús andando
Un breve recordatorio:
¡Dar
gracias a Dios, por tanto…!
También las Eucaristías
En grutas de gran belleza
En sublime compañía
De Don Marcel y Julieta
(Epístolas de los fallecidos padres de
Alejandro y Pedro Ignacio)
Llegamos hasta el Mar Muerto
Con un calor implacable
Mas resucitamos luego
Gracias
a un Bar inefable
(El bar más bajo del planeta a 420 metros bajo el nivel del Mar)
Seguimos a Jericó
Acantilados y grutas
En donde el Diablo tentó
A Jesús, que ni se inmuta
Y así cruzamos frontera
A Jordania, feliz Reino
Cuya capital Amman
Nos recibió con buen genio
Anuash, nuestro nuevo
guía (Car wash para
los amigos)
de corazón muy amable
Hizo de la travesía
Una experiencia entrañable
Es nuestro primer destino
El
sagrado Río Jordán
Lugar del bautismo mismo
De Jesús, por el gran Juan
Muy emotivo el momento
Pues renovamos los votos
De este vital sacramento
En estos sitios remotos
Al Monte Nebo, después
La montaña preferida.
Lugar donde Moisés
Vio la Tierra Prometida
Y después de tanta acción
Pues pernoctamos en Petra
El hotel era un primor
Sólo que había ley seca (cero alcohol)
Uno queda sin aliento.
Petra en todo su esplendor
Es la mirada del tiempo
El ojo del Creador
Se siente uno muy pequeño
La sensación es muy fuerte
Si Petra resulta un sueño
Pues que nadie despierte
La cualidad de este encuentro:
Va de mejor a mejor
Y es que cada momento
Pues supera al anterior
WADI RUM
La vastedad del desierto
Profundiza el sentimiento
Una joya a cielo abierto
Que nos deja sin aliento
Como los propios beduinos
(Pues compartimos con ellos)
Bailamos, bebimos vino (no había ley seca)
Y montamos en camellos
De aquí seguimos al Sur
Enrumbados, al Mar
Rojo (literal y
metafóricamente)
Que mas bien es bien Azul
Y nos sirvió de remojo
Áqaba es encrucijada
De fronteras inauditas:
Egipto, Israel, Jordania
Y hasta la Arabia Saudita
Y gracias a la vida pues,
Nos pudimos sumergir
En aguas que Moisés
No titubeó en dividir
De la playa y su vaivén
Otra vez cruzar frontera
Destino: Jerusalén
Con escalas de primera
Teleférico a Massada
Fascinante fortaleza
Donde judíos,
a Romanos
Dieron pues una sorpresa (vean la película)
La vía a Jerusalén
Es por demás fascinante
Bordeando azules de ensueño
Pasamos frente a Qumram
Donde un fugaz caminante
Por azar y sin empeño
Gracias a su cabra loca
Y a la historia, que trastoca
Se consiguió en desconcierto
Papeles algo arrugados,
Los pergaminos sagrados,
Manuscritos del Mar Muerto
Con la quijada en el piso
Pues son muchas emociones
A Jerusalén seguimos
Entre sueños y canciones
Esperaba un detallazo
Que a los viajeros encanta
Un brindis en el ocaso
Al pie de la Ciudad Santa
Gracias Pedro, por el vino
Por las copitas de Olivo
Por hacer de este camino
Inolvidable y festivo
Jerusalén es un cosmos
Complejo rompecabezas
Donde Dios, hecho un gran rollo
Tendrá dolor
de cabeza (como dice
Laureano Márquez)
Tendría que extenderme a placer
Si describiera a conciencia
Y ya al máximo abusé
Su generosa paciencia
Pero hay momentos de bien
Que yo no puedo omitir
como aquel día en Belén
que quedó en nuestro sentir
Fue en el Campo de Pastores
En una divina gruta
Donde al mundo se anunció
Que llegó la Criatura (El Niño Jesús)
Donde entonamos el canto
Más bello y tradicional
Nos ahogamos en el llanto
Dulce y muy trascendental
Si la Virgen fuera Andina
Y San José de los Llanos
El Nino Jesús seria
Un niño venezolano
(escrito por la mama de nuestra compañera de
viaje Nela Gibson)
Jerusalén
Sus puertas y sus murallas
Basílicas y mezquitas
Huellas hay de mil batallas
Gloria y dolor nos visita
Jerusalén
Impresiona nuestros ojos
Y nos conmueve hasta el alma
La historia mira de reojo
En cada rincón en calma
Demasiado los lugares
Y en las palabras me pierdo
Cada quien en sus hogares
Atesora sus recuerdos
“Dicen que no son tristes las despedidas
Dile al que te lo diga que se despida”
(mi mamá lo decía siempre)
Días de risas y asombro
Bostezos de cansancio bueno
Solidarios hombro a hombro
Yala Yala… La maleta…
Al autobús, a rezar…
España, Venezuela
Hermanados en la fiesta
Hummus, falafel y pita
Sólo nos queda desear
¡Que este viaje se repita!
Nunca adiós.
Siempre
¡Hasta que nos volvamos a encontrar!
¡Gracias a todos!
Agosto 2018
PD: He estado
perdida del blog, por buena causa. En lo anterior andaba hasta hace poco. El verso no es mi
fuerte, y quizás suena medio forzado a veces, pero disfruté mucho recordando y
escribiendo. Sería muy largo mencionar
todo lo que vimos e hicimos, y con todo así me quedó bien largo. Se que es un
poco personal, pero bueno quería documentarlo aquí en mi espacio de jugar. Un
viaje realmente maravilloso. Gracias a Dios y a mi consuegra que me lo puso en
el camino.
Pues te ha salido uns descripción preciosa de ese viaje. El romance es muy lindo y con numerosos detalles geográficos e históricos. Felicidades.
ResponderBorrarUn abrazo.
Gracias Rafael, viniendo de un poeta como tu, es un muy buen elogio! Pero el merito es del viaje y su gente que son muy especiales.
BorrarUn abrazo grande