Dedicado a Aura Elena,
quien me inspiró este “momento mágico”.
Después de las
celebraciones, todos salimos de la fiesta con un regalo de salida: una chupeta.
Así se llama en
mi país, pero creo que en otras latitudes se le conoce como paleta, chupete, o
chupetín.
Por definición se
trata de un caramelo sólido y redondo, sostenido por un palito que sirve de
mango.
Pero esta
chupeta que nos dieron a todos quienes asistimos a la fiesta, es diferente,
aparte de colorida, dulce y enorme, es especial.
Yo no he hecho
sino disfrutar de ella desde que llegué, sola o acompañada.
Como dije al
principio, esta chupeta que recibió cada invitado es muy singular, no sólo por
su dulzura, sino porque tiene una característica extraordinaria.
Es infinita.
Dura para toda
la vida y más.
Es un caramelo hecho
de tiempo bien vivido, de amor, de amistad, de música, de abrazos, de familia,
de bendiciones.
Es la chupeta
de los buenos recuerdos.
Gracias a mi
hijo Santiago y su esposa Alba, por tan maravilloso regalo de salida después de
su boda.
Aquí sigo y
seguiré por mucho rato…disfrutando de mi chupetota.
Me encantó este escrito!! Me siento muy agradecida por haber recibido esa chupeta tan especial ❤️
ResponderBorrarGracias por tu comentario y seguimos disfrutando de esos recuerdos tan bellos.
BorrarAbrazote!
Es un bonito detalle.
ResponderBorrarUn abrazo.
Un caramelo que no se acaba nunca, como los recuerdos.
BorrarAbrazos Rafael!
Hola Natalia.
ResponderBorrarPor mi tierra se llama piruleta. Me trajiste recuerdos de la infancia.
¡Un abrazote!
Hola Roland! Piruleta, que buen nombre, me encanta.
BorrarUn abrazote!!!